“Equilibrio del poder: verdad o mentira” - "Power Balance: truth or fake”

A raíz de un comentario que escuché sobre la pulsera "Power Balance” (también disponible en colgante), me lancé a investigar quién había creado este novedoso producto.

Lo primero que descubrí es que hay dos corrientes contrapuestas a favor y en contra de la pulsera. Sus partidarios, muy numerosos, con presencia hasta en grupos en el Facebook, son acérrimos defensores de su efectividad, y muy dados a colgar videos en Youtube para demostrar sus resultados. Y sus detractores la ponen a caldo a base de bien. No puedo evitar reproducir el comentario que leí en un foro y que me arrancó unas buenas risas durante un rato:

“Si te digo que: poniendo en una botella de agua, medio litro de cerveza mezclada con media cucharada de sal y otra media de azúcar. Y escondiéndola en el maletero tu coche se agarra más a las curvas porque se catalizan las vibraciones que los antiguos orientales utilizan desde hace siglos. Tú no puedes opinar, ¿verdad? P.D. Si respondes que no puedes opinar es porque eres definitivamente tonto.”

Lo segundo que descubrí consultando algunos blogs (fuentes de información no contrastadas, pero dado que la web del producto no da mucha información, pueden ser orientativos…), la pulsera fue creada en California en 2007 por un grupo de atletas interesados en la salud holística (es decir la salud vista desde la perspectiva de que el hombre y los otros organismos funcionan como unidades completas, integradas, y no como un agregado de partes separadas) que han querido desarrollar una pulsera de silicona que tiene una especie de holograma en mylar (es decir un material sintético utilizado para la confección de velas). [Blog recomendado: http://blogs.publico.es/ciencias/?p=795]

La web oficial (en inglés), como decía anteriormente, no da muchos datos sobre cómo está elaborada, de qué manera han testado científicamente sus resultados y/o beneficios, pero tiene una sección de testimonios muy entretenida.

Lo tercero que he descubierto es que como en otras grandes revoluciones que quieren ser vendidas como grandes verdades, utiliza una combinación de conceptos pseudo-científicos que entra muy bien, hay que reconocerlo. De hecho en este caso concreto la pulsera tiene un holograma, de nuevo según lo que dicen sus creadores, en el que "se han incrustado frecuencias naturales halladas en la naturaleza”. Así mismo, insisten que la pulsera "no contiene ninguna fuente de energía por sí sola, las energías bioeléctricas de cada individuo se cargan en el holograma quantum, sintonizando con el biocampo, armonizado con el chi interior”. Suena muy zen, ¿verdad?

Según sus creadores, “cada objeto de este planeta, animado o inanimado, tiene una frecuencia que puede calcularse con exactitud. Albert Einstein sabía que todo en el universo emite una frecuencia única”. Asimismo defienden que “se ha descubierto que la frecuencia general de una persona sana está entre 6,2 a 7,2 Hz, y cuando baja de estos niveles, los resfriados y gripes aparecen más fácilmente”. Según todos sus usuarios y el fabricante, la pulsera puede beneficiar a su portador en el equilibrio, elasticidad, fuerza y bienestar general... Vamos gloria bendita… y ello me llevó a recordar a aquella otra pulsera que se comercializaba años atrás… RAYMA Quartz, ¿La recuerdan?

Lo que me llevó al cuarto punto, es decir que todo está inventado. La alhaja RAYMA la llevaron también mis abuelos y, como en el caso de la “Power Balance”, todo el mundo loaba sus beneficios para la salud. Sin embargo Rayma había sido elaborada con una misteriosa aleación de metales, recubiertos con oro. De hecho me he informado y se supone que los metales tienen sales que forman iones electropositivos (cationes) en disolución. Fuente: Wikipedia. Así que se basaba en ciertos principios físicos básicos para demostrar su eficacia.

Es por ese motivo que en los anuncios se anunciaba que esta pulsera actuaba en los campos magnéticos, y se basaba en la filosofía de que: "las células se com­por­tan como di­mi­nu­tas “pilas” cuyo po­ten­cial eléc­tri­co entre el in­te­rior y el ex­te­rior es del orden de 70 mi­li­vol­tios en es­ta­do sano. Si las cé­lu­las en­fer­man por in­fec­ción, trau­ma­tis­mo, en­ve­je­ci­mien­to, o cual­quier otra causa, pier­den su re­ser­va de ener­gía, es decir, ”se des­car­gan” como si de una pila se tra­ta­se". Los creadores de Rayma "com­bi­naban los co­no­ci­mien­tos an­ces­tra­les de la Me­di­ci­na Orien­tal, Ying y Yang, con la más avan­za­da tec­no­lo­gía sobre au­to­in­duc­ción. Y sin concretar que efecto tenía esta combinación se lanzaban a creer que "los re­so­na­do­res bio­elec­tro­mag­né­ti­cos RAYMA pue­den tener efec­tos te­ra­péu­ti­cos sobre el cuer­po hu­mano por la in­ter­ac­ción con sus bio­co­rrien­tes si es uti­li­za­do como pul­se­ra". Según expertos en los brazaletes ionizados tratan de actuar sobre la energía (es decir entre la interacción de iones positivos y negativos).

En quinto lugar, todo este bagaje me ha llevado hasta un artículo de Koo [Disponible en: http://healthpsych.psy.vanderbilt.edu/TourmalineResearch.htm], en el que se comenta que los iones positivos y negativos se encuentran en todas partes, desde el aire, el suelo, e incluso en nuestros cuerpos. En sales, como la sal de mesa común, el cloruro de sodio (NaCl), etc.,... y todas esas moléculas están conectadas con enlaces iónicos. Una vez roto el vínculo, (puede ser a través del agua, el viento, o alguna fuerza exterior de otro tipo) de la sal constituye un catión y el anión. Cationes cargados positivamente y aniones son iones cargados negativamente. Estos diferentes tipos de iones de circular por todo el cuerpo y sirven de todo, desde los componentes de nuestro nivel de pH, a las señales químicas de las proteínas. (Tocci y Viehland, 1996). Es por ello que existen teorías ying-yang en la salud holística que profundizan en estos aspectos... Y todo ello me lleva a preguntarme si las pastillas de sodio que se ponían tiempo atrás los deportistas debajo de la lengua (que yo siempre había interpretado que tenía una función básica, es decir reconstituir las sales minerales del cuerpo, perdidas por el intenso ejercicio, y que ahora pienso tenían otra intencionalidad…

Y finalmente, todo ello me ha llevado a investigar directamente en la base de datos biomédica Medline (ya son ganas de invertir mi tiempo inútilmente) y he llegado a un interesante artículo de Adey publicado en The Journal Cell Biochemistry en 1993 titulado: "Biological effects of electromagnetic fields" [Disponible en: clic aquí]. Reproduzco algunas de las conclusiones de esta revisión que me han parecido muy interesantes, porque conduce a posteriores reflexiones (un poco de paciencia lector):

La vida en la tierra se ha desarrollado entre los campos electromagnéticos (EM). Durante las últimas centurias, el entorno natural dónde se producían se ha visto modificado abruptamente por la irrupción considerable de un amplio espectro de campos EM generados por el ser humano. Precisamente el ser humano ha generado modelos basados en el equilibrio de la termodinámica y los efectos termales. Estos campos eran inicialmente considerados demasiado débiles para interactuar con los sistemas biomoleculares, y por tanto incapacitados para influenciar las funciones fisiológicas.

Estudios de laboratorio han probado con mayor éxito una gama de efectos biológicos de los campos EM en los niveles celular y molecular, centrándose en una exposición a niveles atérmicos. Una conclusión emergente claro es que muchas interacciones observadas no se basan en calentamiento de los tejidos.

La modulación de eventos químicos en la superficie celular, debida a la debilidad de los campos EM indica básicamente una ampliación importante en la debilidad inicial en aquellos momentos asociados con la unión de las hormonas, los anticuerpos y los neurotransmisores a sus puntos de unión concretos. Así los iones de calcio juegan un papel clave en esta amplificación. Estos mismos estudios apoyan los nuevos conceptos de comunicación entre las células a través de las barreras de las membranas celulares, y señalan con certeza creciente, una organización física esencial en la materia viva, a un nivel mucho más fino que la imagen estructural y funcional se define en la química de las moléculas.

La colaboración entre los científicos físicos y biológicos, en la búsqueda de soluciones en la naturaleza física de la materia, a través de un enfoque basado en la materia, desde un punto de vista biológico. De manera que la evidencia indica que la mediación altamente no lineal, los procesos de no equilibrio en los pasos críticos en el acoplamiento de señal a través de las membranas celulares.

Aumenta continuamente evidencia disponible sobre estos hechos, que se refieren a "estados cuánticos" y las respuestas de resonancia en los sistemas biomoleculares, y no a la termodinámica de equilibrio asociados con los intercambios de energía térmica y calentamiento de los tejidos.

En conclusión, resumiría toda esta cuestión en siete puntos básicos:

· El primer lugar, es que todos estos productos que surgen se retroalimentan de investigaciones que aún están en fase de comprobación y sobre las que no podemos hablar con absoluta certeza. De hecho en el programa "Afers Exteriors" (Cadena TV3), que se centró en Suiza, se hacía mención del famoso acelerador de partículas del CERN. ¿A qué viene todo esto a colación? Pues resulta que el presentador del programa, Miquel Calçada entrevistó a un científico que trabajaba en el acelerador de partículas y que puso de manifiesto los tímidos pasos que estamos dando en la física cuántica, la antimateria y la comprensión del universo. [Ver video en: http://www.tv3.cat/videos/1634439]. De manera que la invención de la piedra filosofal, es casi un accidente en el universo, en los tiempos que corren.

· En segundo lugar, las campañas para la difusión de estos productos hacen uso de una terminología pseudo-científica para relatar las bondades del producto, pero sin facilitar ni un dato empírico que dé validez a los descubrimientos, ni que demuestren su eficacia. Sin embargo, hay que destacar la habilidad de los comerciales y los publicistas para venderlos. Lo hacen con mucho éxito, e insisto, son atractivos para todos nosotros.

· En tercer lugar, envuelven el producto de un aura tecnológica, diseño y “wellness”, concepto muy de moda, para que los seguidores de este tipo de filosofía de “cuidado integral de la salud y de la mente” entren en la “órbita” de la “new wave”.

· En cuarto lugar, sus campañas de marketing están muy bien elaboradas. El nombre del producto menciona dos conceptos simples pero con fuerza, que recuerda a otros productos habituales en las teletiendas. ¿Verdad?

· En quinto lugar han diseñado un producto de estilo deportivo (recuerda a otros complementos de la imagen del deportista y la pulsera está disponible en diferentes colores), que incide con éxito en muchos aspectos (insisto diseño, portabilidad, presencialidad visual, etc.) que penetran con fuerza en la mente del consumidor. ¿Por qué no un parche tipo los de la nicotina? ¿por qué han querido diseñar un producto de consumo? La respuesta es evidente…

· En sexto lugar, atención a la interesante segmentación de su mercado. Hablamos de un público diana muy definido: gente joven y deportista, dispuesta en invertir en su rendimiento físico.

· Y por último, y no menos importante,…así como no todo es blanco o negro en este mundo, es importante decir que: al que lo prueba y le funciona, y además está dispuesto a invertir en ello,… no habrá perdido nada… por otro lado, en los mejores de los casos, el comprador se puede encontrar con un agradable efecto placebo, nada despreciable... "Porque ande yo caliente... y ríase la gente" que dice la sabiduría popular... y al que no le funcione sólo habrá perdido 35€ y la fe en los productos “milagro”.